Y me quedé soñando, con la ilusión a cuestas,
con la esperanza guardada,
en el bolsillo roto de un pantalón,
en el baúl sin fondo de mis decepciones.
Aletargado en el tiempo, obsesionado con verte.
Se enrojecieron mis ojos se marchitaba mi mente
No hay comentarios:
Publicar un comentario